En Kreston Global nos hemos propuesto identificar las tendencias de internacionalización, así como las estrategias y herramientas que las empresas medianas emplean para afrontar los desafíos del emprendimiento global. Con este objetivo en mente, realizamos el estudio ‘Going Global: trazando la ruta hacia el éxito de los interempresarios’ (‘Mapping the Route to Interpreneurial Success’), encuestando a 1.400 empresarios de 14 países que ya han abordado con éxito esta aventura empresarial.
De esta investigación, en la que hemos consultado a altos directivos de compañías de tamaño medio con una facturación de unos 350 millones de euros, hemos obtenido valiosas conclusiones que pueden guiar a otras empresas en su proceso de expansión global.
A la hora de iniciar esos procesos de internacionalización, los empresarios españoles buscan distintas opciones de financiación para sus inversiones. Aquí encontramos el primer dato llamativo que arroja esta encuesta: el 80% recurre a capital privado, aunque esta cifra asciende hasta el 90% si consultamos a los empresarios que han participado en la encuesta a nivel global. Solamente el 16% de los empresarios españoles prefiere la opción de acudir a entidades bancarias, un dato similar a la media mundial (17%).
En cuanto a otras formas de financiación, el crowdfunding es una opción para apenas el 19% de los empresarios españoles mientras que casi el 30% de las empresas a nivel global se lo plantea; y la búsqueda de financiación en los mercados de capitales es una alternativa para el 30% de los directivos españoles, una cifra que se eleva hasta el 39% a nivel global.
Centrándonos en las respuestas de los emprendedores españoles, casi la totalidad de ellos (96%) coincide en que su expansión internacional ha supuesto un impacto positivo en su negocio.
¿Cuáles han sido los principales beneficios de abrirse a mercados internacionales? El 48% destaca el incremento de las ventas e ingresos y un 37% apunta a un mayor reconocimiento y una mejora de la marca.
No en vano, casi la mitad de los directivos españoles consultados (48%) reconoce que el principal motivo por el que inició su expansión internacional fue para lograr nuevas oportunidades de negocio.
A pesar de los beneficios que conlleva, la adopción de estrategias empresariales globales presenta diversos desafíos. Entre ellos, los empresarios españoles resaltan la complejidad de comprender y adaptarse a las normativas fiscales extranjeras, así como la necesidad de ajustar la logística y la cadena de suministro a escala internacional. Otro desafío crucial es la identificación y colaboración con socios locales idóneos para facilitar la expansión empresarial.
Una vez superadas estas barreras, y dados los beneficios que obtienen gracias a su proceso de internacionalización, para las empresas españolas el siguiente paso es continuar su expansión. ¿Hacia dónde? La mayoría (89%) prevé una expansión en el próximo año, principalmente hacia mercados de Europa occidental (57%). Pero aquí encontramos otro dato curioso, en segundo lugar aparece Europa del Este (36%), por delante incluso de los mercados de Norteamérica (25%) y Sudamérica (24%).
Otra pregunta que desde Kreston Global hemos planteado a los ‘interempresarios’ españoles es por qué eligen dichos destinos para su expansión internacional y vemos que los factores clave son la proximidad geográfica (35%), las perspectivas de crecimiento futuro (32%) y la existencia de acuerdos comerciales favorables (32%).
A la vista de estos datos, se constata la importancia que la internacionalización puede tener para las empresas medianas españolas. Ello evidencia también la necesidad de contar con la ayuda de agentes como Kreston Global, pues somos una red mundial presente en gran cantidad de países, lo que nos permite asesorar a las empresas españolas en cuanto a las características de esos mercados y las oportunidades a las que se puede acceder en ellos.
